miércoles, 14 de enero de 2009

"Ya lo pensaré mañana"


Pocos personajes tan míticos y singulares como Escarlata O´hara ha dado la industria del séptimo arte. La protagonista de una gran joya del cine, “Lo que el viento se llevó”, es una mujer caprichosa, manipuladora, egocéntrica, coqueta y en ocasiones incluso egoísta, pero con una gran fortaleza humana y un increíble afán de superación.

Es posible que para muchos el personaje de Scarlett no sea un ejemplo a seguir, pero nadie podrá poner en duda que a pesar de su orgullo y vanidad, es todo un símbolo de fuerza por salir adelante, por sobrevivir a la miseria, al hambre, y vencer ante las desgracias de una guerra.

He de confesar que siempre me he considerado fan de este melodrama y que desde la primera vez me enamoró por la interpretación de sus protagonistas, el vestuario, el guión, los decorados, la banda sonora, y que a pesar de sus más de tres horas de duración, he visto una y otra vez, cada una como si fuese la primera.

Sin embargo, hasta hoy no había pensado en la genialidad de la filosofía de Scarlett que ante cualquier problema o adversidad, sin abatirse lo más mínimo, le basta un “ya lo pensaré mañana” para dar por concluido por hoy el problema.

Como seropositivo intento mantenerme informado de la actualidad que gira en torno al VIH y al SIDA, de hecho, siempre reviso los links que aparecen a la derecha de este blog para estar al tanto de las novedades, los avances científicos, etc., de este bichito.

Lo cierto es que aunque a muchos (incluso a mí mismo) esta actitud proactiva por estar informado pueda parecerles positiva, entraña consigo el riesgo de enterarse de noticias buenas, pero también de noticias malas, que son más probables, y también más vendedoras para los medios; que si las personas con VIH tiene más riesgo de contraer una enfermedad, que si hay versiones del VIH más agresivas descubiertas recientemente, que si ahora tenemos que declarar ser seropositivos para viajar a EE.UU., como si tuviésemos que confesarnos por nuestros pecados, y una larga lista que nunca acabaría …

La cuestión es que el riesgo de mantenerse informado es que muchas veces nos hace pensar demasiado en un futuro, que a fin de cuentas es incierto para todos los seres humanos, seropositivos o no. Desde luego, no por este motivo voy ponerme una venda en los ojos y dar la espalda a la actualidad que nos rodea, pero la próxima vez que por mi cabecita ronde uno de esos pensamientos negativos, lo tengo claro, como decía Escarlata: “Ya lo pensaré mañana. Me volvería loca si lo hiciese ahora.”

Esta entrada está dedicada a un reciente amigo que he tenido la suerte de conocer: ¡Gracias por devolverme un poco de inspiración!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola no sé muy bien como funciona esto, por eso te escribo en la última entrada (creo que se llama a sí) para decirte que tu blog me parece extraordinario. Me siento indentificado con muchas de las cosas que escribes, me ha emocionado especialmente "El acusado se declara inocente" Yo hace varios años que estoy diagnosticado, pero durante aproximadamente año y medio me he sentido como describes ahí. Después tuve otros tropiezos de salud y el día a día ha sido como una carrera y tan solo hace unos meses que creo que me he declarado de verdad INOCENTE. Con derecho a ser feliz y a volver a sentir.Creo que has conseguido un nuevo lector, ya he añadido tu blog a mis favoritos. dos de las bastantes cosas que me ha enseñado este "huesped" y sobre todo estás dos las he aprendido últimamente; una es a manejar medianamente Internet, y la otra que este mundo está lleno de personas estupendas que como tu sacan aalgo positivo de los malos vientos. Un abrazo muy fuerte.
Ah! me llamo Jesús y soy de Madrid.

Anónimo dijo...

Hola Jesús,

Muchas gracias por escribirme, y me alegro mucho de que te guste lo que lees en el blog; no sé si es bueno o malo, pero lo que sí es cierto es que son reflexiones sinceras de esta "nueva vida" con el "huesped" como tú dices. Espero que sigas leyéndome y escribiendo comentarios siempre que quieras. Un fuerte abrazo, y cuidate.